Unas declaraciones del presidente de la Asociación de Pequeños Accionistas del club, Antonio Aguilera, han hecho saltar las alarmas y han provocado que el nombre de la estrella de Hollywood cope los titulares de los diarios nacionales e internacionales como el supuesto comprador del equipo de fútbol del Málaga.
En un principio, el dueño del club de Segunda pretendía 100 millones de euros pero ahora estaría dispuesto a negociar la venta por un monto menor.
Según contó el dirigente, "hay un grupo muy importante de gente muy ligada a la producción de cine y televisión que están aquí en Málaga, que quieren hacer de esta ciudad el Hollywood europeo. Han estado y están grabando series aquí en Málaga para Amazon de un potencial económico muy grande". Al parecer este grupo inversor ya habría realizado una primera oferta de unos 15 millones de euros al aún máximo accionista catarí antes de que acabase el 2019, pero la respuesta fue negativa.
La operación, en cualquiera de los casos, no es para nada sencilla. El jeque, que adquirió el Málaga por 36 millones en 2010, afronta una deuda actual de más de cinco millones después de que un juez lo apartase la pasada semana del club, poniendo en su lugar a un administrador, el abogado y economista José María Muñoz, que dirigirá a la entidad durante los próximos seis meses. Al Thani y sus hijos, Nasser, Nayef y Rakan, también miembros del consejo de administración, quedan apartados de la gestión del equipo tras la querella presentada precisamente por la Asociación de Pequeños Accionistas que acusa al jeque de "administración desleal, apropiación indebida y blanqueo de capitales".
Nota de Gustavo Spitaleri
