Stefi Roitman está viviendo un gran momento personal y profesional. Comprometida con Ricky Montaner, la modelo y conductora, que está viviendo en Miami, decidió hacer realidad uno de sus sueños e incursionó en el mundo de la moda presentando su propia línea de bikinis que nació en cuarentena para buscar el empoderamiento femenino
A través de un gran desfile, Stef hizo la presentación de “My Happy”, su marca de traje de baño de dos piezas creada con la diseñadora y cantante argentina Mery Racauchi.
En el evento al que asistieron varias figuras del mundo del espectáculo y de las redes sociales como Lelé Pons, la sobrina de Chayanne y el cantante Guaynaa, se pudo ver en detalle cada uno de los modelos diseñados en la colección, mientras sonaba de fondo la música en vivo de Mau y Ricky Montaner.
Las bikinis se pueden conseguir a través de la página web del emprendimiento, donde se puede leer que la marca fue creada para resaltar la belleza natural de las mujeres ya que los modelos de trajes de baños incluyen todos los talles, desde el más chico hasta un triple XL para incluir a todos los cuerpos y mujeres.
A pesar de estos aspectos positivos, no tardaron en llegarle las críticas por redes sociales principalmente por el valor de cada pieza, que cuesta unos 50 dólares tanto para la parte superior como inferior de la bikini. Es decir: para comprar el conjunto, hay que invertir unos 100 dólares, lo que equivale a 9600 pesos argentinos. Además, la única forma de pago es con tarjeta de débito al contado y no posee la opción de comprar en cuotas, por lo tanto, es casi imposible para sus fans de nuestro país.
Pero eso no es todo, en Twitter también la acusaron de copiar algunos de los diseños
